Gran Viaje al Sur: 8avo dia

Después de descansar muy bien me levante temprano para ir a lavar la moto, no quería esperar más, ya habían pasado varios días de cuando anduve por la playa y se empezaba a apreciar que el chapón cubre cárter que se puse se estaba empezando a oxidar, así que me fui al Guspamar, taller de Esteban, quien ayer me ofreció prestarme la hidrolavadora, llegue a las 10 y no lo encontré, así que me fui a dar unas vueltas y recorrer Viedma, la cual posee una costanera HERMOSA, la verdad, hasta ahora es primera vez que veo una costanera tan linda, será por el agua cristalina del rio, quizás por la proximidad de la costa opuesta Carmen de Patagones, o por el césped y arboles de la misma costanera, lo más probable es que sea un conjunto de todo esto mencionado.

A las 11 fui de nuevo al taller, lo encontré al “Loco” y me puse a lavar la moto con la atenta mirada de uno de sus mecánicos, quien me fue de mucha ayuda, consiguiéndome todo lo que yo necesitara. Seque la moto con papel y con aire comprimido, y rocié casi todas las partes metálicas con un aceite anticorrosivo tipo WD-40.

Como toda ciudad/pueblo de interior, hacen doble jornada, así que a las 12 ya estaban cerrando para retomar a las 3pm por lo tanto fui a la casa de Fernando a comer y conversar con él, María José, que ayer estaba muy amiguera hoy le volvió la timidez, llego Lujan y comimos y conversamos, para todo esto, me había escrito Diego, el dueño de la Suzuki Bandit que iba a comprar en octubre, para encontrarnos. Así que apenas terminamos de comer, deje a mis anfitriones hacer la siesta tranquilos y me fui a encontrar con Diego, con el cual nos quedamos conversando un largo rato y luego llego lo que tanto estaba esperando, el momento de probar ese tetra cilíndrico, el sonido, es ORGASMICO, realmente los videos no le hacen justicia. La pude usar en pocos cientos de metros, ya que la costanera tiene muchos reductores de velocidad, por lo tanto creo que mas que tercera no llegue a usar, pero la misma moto con su sonido te pide más!

Diego después se tuvo que ir a buscar a su hijo al colegio y yo decidí irme al balneario El Cóndor, que me recomendó mi primo, queda a 30kms de acá y en verano se debe poner muy lindo, pero actualmente estaba muy muerto, quizás por el horario también, luego me fui a un sitio que creo que se llama “El Pescadero”, donde se unen el rio con el mar, una zona muy linda con agua muy tranquila, sin olas, medio aburrido para mi gusto, pero había gente bañándose y disfrutando el lugar.

Volví para El Cóndor y seguí hacia “La Lobería”, la cual quedaba a otros 30kms, el camino, que decirles, HERMOSO, un camino costero, pero que va todo por arriba de un acantilado, o sea, se ve el mar pero desde unos 100 o 200 mts sobre el nivel del mar, en cada entrada de tierra que veía me metía buscando buenas fotos.


Cuando finalmente llego a la lobería, los lobos marinos estaban de vacaciones!!! No había ninguno, todo el viaje en vano, así que me regreso. Durante la vuelta, agarro un pozo y vuela la cámara de fotos a la mierda, la veo desarmarse mientras rodaba por el asfalto, freno, vuelvo y empiezo a levantar las cosas, la cámara, de pedo veo la memoria entre el césped de las banquinas, y las pilas recargables a pocos metros mas allá, la armo toda y la maravilla esta prende y anda de lo mas bien, como que no le hubiese pasado nada, esta toda raspada externamente, pero que manera de aguantar golpe, cerré el estuche de la misma y seguí mi camino de regreso.

A la vuelta pase por lo de Fernando, el cual no se encontraba y estaban Lujan con Agus estudiando, les pregunte donde podía comprar facturas para la merienda y me mandaron a una panadería que hace una facturas de-li-cio-sas, pasamos la tardecita conversando mucho con ellas y finalmente María José se decidió amigar!

Me quede toda la tarde jugando con ellas y a la noche Lujan preparo unas pizzas exquisitas!
Como verán, he pasado comiendo y comiendo, como para juntar reservas para el resto del viaje!

Mañana, me espera una cita con el diario La Palabra para una entrevista e iré a recorrer un poco Carmen de Patagones.

Mañana también arrancan el viaje Carlos y Cristian, así que muy buenas rutas para ellos, y nos vemos el viernes al medio día, los voy a llevar por esa ruta costera para que disfruten el maravilloso paisaje que brinda.